El modelo que cura - Terence Mckenna

Si es cierto que el hongo suprime la dominación masculina, si de hecho promueve valores comunitarios, y así sucesivamente ... qué cosa maravillosa debe ser. Y podemos dejarlo ahí. Pero eso es solo una pequeña parte de la historia. La verdadera historia es ¿qué tiene de maravilloso? Dado que es una experiencia mental, ¿qué tiene de maravilloso que pueda detener la tendencia humana a caer en estas formas y estilos de vida contraproducentes? Bueno, lo genial de esto es que es nada menos que la mitad del universo intelectual. Es, lo que yo llamo la conexión con la mente de Gaia. En otras palabras, hasta este punto, lo que he dicho podría categorizarse como solo el discurso de una excelente droga psicodélica. Y entonces dirían "bueno, entonces este tipo aboga por el uso de una droga psicodélica excelente", parece razonable o poco razonable, dependiendo de dónde fuiste a la iglesia. 

Pero no es un desafío para el paradigma. Lo que sí desafía el paradigma es el contenido de la experiencia. El contenido de la experiencia es completamente, alucinante, completamente desconcertante. No sé qué vamos a hacer con el contenido de la experiencia, porque cuando es completamente desplegada, y la hayamos discutido en su totalidad, no va a dejar un ladrillo sobre otro en el edificio alegremente ingenuo que nuestra inmadura civilización se ha erigido como verdad universal. La ciencia no va a poder sobrevivir al encuentro con la experiencia psicodélica. Porque no es un encuentro con lo freudiano, ya sabes, los recuerdos reprimidos de tu infancia miserable y difícil o lo que sea que hayas pasado. Y ni siquiera es un encuentro con los miserables recuerdos de la maltrecha infancia de la especie humana por la que todos pasamos, a la Carl Jung. Todo eso está ahí, pero eso está en el pasillo donde cuelgas tu sombrero y en la antecámara donde te llevan el abrigo. El evento principal, amigos, ni siquiera tiene nada que ver con la psicología de los seres humanos. El evento principal es otra dimensión. Una dimensión tan bizarra, tan titánicamente peculiar, tan extraña, tan inesperada por nuestro lenguaje, nuestra historia, nuestra literatura, que, es literalmente como el descubrimiento de otro mundo. Y hay vida en ese mundo. Ahora, una cosa curiosa acerca de descubrir nuevos mundos es que, uh, normalmente ... cuando trazas el nuevo mundo en un mapa, normalmente descubres que hay alguien viviendo allí. Y para ellos no es el nuevo mundo en absoluto. Y sabes, no has descubierto nada. Solo acabas de aparecer en medio de la escena con un rap distorsionado como el de Cristóbal Colón. Y esto es lo que encontramos con los psicodélicos.

Y es por eso que el chamanismo se convierte, en mi opinión, en el puente para comprender de qué se trata este renacimiento arcaico. Los alucinógenos chamánicos son la carne de la cosa, la esencia de la médula, el centro del mandala. Pero el puente hacia eso son los efectos que tienen estas cosas. El contenido. Las experiencias de las que podemos hablar y contarnos. Y lo que estamos descubriendo a través del chamanismo al mirarlo, no a través de los ojos condescendientes del hombre blanco que está simplemente impresionado por la singularidad increíblemente divertida de lo que sea que estas personas de piel morena soñaron, no eso, sino a través de darnos cuenta de que estamos enfermos y ningún médico puede curarnos porque no tenemos esa clase de enfermedad. Es una enfermedad del alma. Quiero decir, tiene que ser una enfermedad del alma. Y cuando vemos cosas como Chernobyl, o los campos petrolíferos de Kuwait, o la Reserva Nuclear Hanford en Washington, cuando te das cuenta de lo que esto realmente significa, entonces te das cuenta: esta es una especie desquiciada. Esta es una especie terminalmente depravada. Y lo que se requiere es volver a un modelo que pueda sanar. Y de eso se ha tratado siempre el chamanismo. Y no lo hemos reconocido, porque la parte del ser humano a la que se dirige el chamanismo, que es el alma y el espíritu, tenemos una tradición de 500 años que niega que existan tales cosas. Entonces, para nosotros, es absurdo, el chamanismo. Es, ya sabes, sonajeros pintados, chicos bailando en medio de la noche, soplando agua perfumada y fumando demasiado tabaco. Eso es el chamanismo para nosotros, porque no podemos ver con los ojos que comprenden. 

Cuando lo entendemos, nos damos cuenta de que nos han quitado la mitad de nuestra mente. Eso sí, el cuerpo humano sobresale en el espacio profano entre 120 a 350 libras de carne en algún lugar del Universo. Pero ese no es el dominio de la humanidad. El verdadero dominio de la humanidad incluye eso y mucho, mucho más. Porque el verdadero dominio de la humanidad es un dominio que honra a la mente como un yo y como paisaje. Quiero decir, eres una criatura libre en un paisaje de significado. Y eres ese paisaje de significado. Y al perder el contacto con esto, nos hemos vuelto esencialmente, eh, patológicos. Muy necesitados. Este es un patrón típico en una persona con una infancia abusada, se vuelven muy, muy necesitados y, muy orientado a los objetos, muy conscientes de la seguridad, muy ansiosos. Esta es una imagen de nosotros y nuestra psicología. Y lo hemos hecho... estamos tan metidos en la pesadilla histórica que nunca podemos recordar ninguna otra forma de hacer las cosas. Sabemos que estamos equivocados. Sabemos que no estamos felices. Pero, ¿qué se puede hacer? 

Quiero decir que tenemos un millón de arreglos menores y gente vendiendo todas estas cosas. Quiero decir que acabas de pasar por los pasillos, sabes de lo que estoy hablando. Pero de alguna manera, la salvación misma se convierte en un impedimento para la salvación. Quiero decir, una vez que ves que se venden 500 formas de salvación a precios que no puedes pagar, la misma noción de salvación se vuelve obscena, ¿sabes? Se convierte en una capa más en la estratificación obscena que le quita sentido a la vida, nos quita el poder y nos convierte en un cliente de suscripción que parece ser la forma en que siempre nos vemos obligados a terminar. Bueno, la única forma de salir de esto, requiere de coraje porque tienes que darle la espalda a tu cultura. En el sentido más profundo que existe, porque hay muchas formas de darle la espalda a su cultura. Por ejemplo, si todos visten de gris, tú puedes vestir de verde. Esa es una forma de darle la espalda a una cultura. Pero otra forma es romper sus leyes. Ahora, eso es un poco más serio. Y, ya sabes, trae grandes problemas filosóficos. 

En esencia, la cultura es una enorme flecha que apunta “ve por aquí”. ¿Y sabes qué hay por ese camino? Empobrecimiento, locura, degradación y muerte. Ahí es donde apunta la cultura. Puedes verlo!. Puedes verlo, solo mira hacia dónde nos dirigimos. Si todos en la Tierra aspiran al tipo de estilo de vida que ustedes pueden disfrutar en virtud de haber pagado el dinero para estar en una escena como esta, no hay suficiente vidrio, metal y plástico en el planeta para hacer tantos Celicas y Jaguars, y bluebirds, y snowbirds, y todo el resto de esta mierda. Entonces, lo que se necesita es un despertar.